Con el objetivo de modernizar las normas fiscales internacionales, más de 130 países acordaron una serie de propuestas para prevenir la erosión de la base imponible y el traslado de beneficios (BEPS). En ese sentido, los líderes tributarios deben enfrentar este marco emergente, administrando los posibles impactos.
1. BEPS 2.0
En octubre del 2021, se publicó un acuerdo detallado del Plan BEPS y en diciembre del 2021, las reglas para un impuesto mínimo global. Estos informes están destinados para proporcionar mayores detalles de cómo operarán y cuándo se implementarán a través de dos pilares del plan de acción:
- Pilar 1: Se cambiará la forma en que se asignan las ganancias y los derechos impositivos, utilizando un enfoque de formulario para reconocer un parte de las ganancias en las jurisdicciones de mercado.
- Pilar 2: Se desalentaría el traslado de ganancias a países con baja o nula tributación por parte de grupos multinacionales a través de una forma de impuesto mínimo global recaudado a una tasa del 15%.
2. Reglas
Los países deben implementar en sus jurisdicciones las nuevas reglas de manera consistente y los líderes tributarios están atentos a cada implementación para actualizar los sistemas de su organización para producir los datos necesarios para cumplir con las reglas finales.
Esto puede ser un desafío para los líderes fiscales, ya que deben comprender nuevas reglas y cumplir con diferentes marcos como el estándar global de informes fiscales de Global Reporting Initiative (GRI 207), las normas de informes País por País de la OCDE y las normas de informes País por País de la Unión Europea.
3. Trabajo en equipo
En consecuencia, será vital la cooperación con las áreas de impuestos y finanzas, en especial, para el cálculo de la base imponible para el impuesto mínimo global, incluido el uso de la contabilidad de impuestos diferidos para conciliar las cuentas fiscales y financieras. Así, cumplir con estos requisitos y ayudar a garantizar la coherencia entre dichos datos.
4. Efectos en empresas multinacionales
Se estima que estas reformas tengan gran efecto en muchas empresas multinacionales mediante un cronograma de implementación. Probablemente, los líderes fiscales deban actuar con prontitud para evaluar los impactos potenciales, asesorar a los altos ejecutivos y otras partes interesadas sobre los próximos cambios y determinar qué se debe hacer para cumplir con las nuevas reglas y gestionar sus impactos.
Fuente: International Tax Review 11/04/22