Los precios de transferencia se han convertido en un elemento clave en la gestión financiera de las empresas que operan a nivel internacional. La necesidad de asegurar que las transacciones entre empresas vinculadas estén a valor de mercado requiere de un óptimo análisis de comparabilidad, donde se exploran dos tipos fundamentales de comparables: internos y externos.
En este artículo, exploraremos las consideraciones esenciales al elegir entre comparables internos y externos, independientemente del método de análisis que se haya elegido, destacando la importancia de una selección precisa para lograr un rango de mercado.
Uso de comparables Internos
El uso de comparables internos implica analizar transacciones entre la empresa examinada y una empresa vinculada, así como con una empresa independiente. Esta forma de comparación, directa y familiar, es ideal y fácilmente accesible para la empresa. Sin embargo, su eficacia depende de la sustancial comparabilidad en términos contractuales, análisis funcional, características de la transacción, circunstancias económicas y estrategias empresariales. Si estas condiciones no se cumplen, se requieren ajustes para garantizar la fiabilidad del análisis.
Uso de comparables Externos
Cuando se exploran comparables externos, la atención se centra en las transacciones entre la empresa analizada y empresas independientes. Aunque este enfoque ofrece una perspectiva más diversa, se presenta con desafíos significativos. La mayoría de la información pertenece a compañías públicas y privadas, y la búsqueda de comparables adecuadas puede consumir más tiempo. A pesar de estas dificultades, la utilización de comparables externos es aceptada por las administraciones tributarias siempre que se cumplan las condiciones establecidas. La verificación de las transacciones a valor de mercado sigue siendo crucial al final del análisis.
Selección Estratégica: Internos vs. Externos
La selección entre comparables internos o externos debe ser estratégica y basarse en la información disponible. En nuestra experiencia, las Administraciones Tributarias prefieren el uso de comparables internos en lugar de externos, dado que, teóricamente, estos podrían ser vistos como más fiables, pero su fiabilidad dependerá de la comparabilidad sustancial. No obstante, los comparables externos, aunque son más difíciles de obtener, ofrecen diversidad y pueden ser aceptables siempre que se cumplan todas las condiciones. La correcta elección radica en evaluar la disponibilidad de datos y la confiabilidad de la información.
Conclusión
En el complejo campo de los precios de transferencia, la elección entre comparables internos y externos es crucial para asegurar la conformidad y precisión del análisis. Aunque el uso de comparables internos es preferido, es fundamental evaluar minuciosamente su idoneidad. Los comparables externos, a pesar de los desafíos asociados, no deben ser descartados, ya que las autoridades tributarias respaldan su uso siempre que se cumplan los requisitos establecidos. La clave reside en una selección estratégica fundamentada en la disponibilidad de información y la confiabilidad de los datos, orientando así a las empresas hacia un análisis de precios de transferencia riguroso y fiable.